A estas alturas, es ya evidente que sin datos no hay avance social. Desde La UE lo tienen muy claro y por ello no paran de llevar a cabo iniciativas para encontrar nuevas formas de progresar como sociedad con los datos como base de todo. Una de ellas es la realización de unos experimentos cuyos propósitos y resultados pasamos a comentar.
Dentro del proceso continuo de digitalización social y económica en el que se encuentra la Unión Europea, los datos cumplen con un papel imprescindible, junto a tecnologías y enfoques innovadores para su captura, tratamiento, compartición y uso.
Por tanto, muchos esfuerzos se están enfocando en la creación de un espacio europeo común de datos que abarque la información propia de sectores estratégicos como el medio ambiente, la agricultura, la industria, la sanidad o el transporte.
En este artículo vamos a extraer las principales conclusiones de un conjunto de experimentos que buscaban explorar y mejorar la comprensión de nuevos enfoques y tecnologías para la innovación basada en datos para establecer este espacio europeo de datos mediante la Estrategia Europea de Datos.
La Estrategia Europea de Datos como base
La Estrategia Europea de Datos se marca como objetivo principal que los datos sean el verdadero combustible para el avance social. A través de un espacio único de datos, estos podrán circular sin ningún tipo de obstáculo entre los países miembros de la Unión Europea y entre todos los agentes implicados, como empresas, gobiernos, investigadores, etc.
Unos datos que estarán a disposición de todos y que servirán para tomar decisiones documentadas a partir de su tratamiento y el conocimiento generado. Por supuesto, respetando siempre las normativas referentes a la privacidad y protección de datos.
Todo esto conducirá a una mayor productividad y competitividad, además de avances sanitarios y en bienestar, mejor cuidado de los entornos naturales, mayor transparencia y servicios públicos mejor gestionados.
Para conseguir todo esto, la Unión Europea deberá tomar las siguientes medidas:
- Fijar normas claras y justas sobre el acceso a los datos y su reutilización.
- Invertir en herramientas e infraestructuras tecnológicas para almacenar y tratar los datos.
- Aunar fuerzas para aumentar su capacidad de computación en nube.
- Poner en común los datos en sectores clave, creando espacios de datos comunes e interoperables.
- Dotar a los usuarios de derechos, herramientas y capacidades para mantener el pleno control de sus datos.
¿Qué experimentos se llevaron a cabo para conseguir una mayor innovación basada en datos?
Estos experimentos ya mencionados tratan sobre las siguientes temáticas:
- Almacenar y compartir grandes cantidades de datos: serialización binaria para datos estáticos y dinámicos.
- Llevar los datos a su destino: arquitecturas basadas en eventos para el intercambio de datos.
- Procesamiento de datos cerca de su origen: computación perimetral en dispositivos IoT para detectar la contaminación acústica.
- Aplicación de la automatización en la creación, prueba e implementación de aplicaciones de software: el caso de los servicios de datos basados en la
- nube.
- Combinación de datos del sector público y generados por los ciudadanos: el caso de las direcciones.
- Abordar las alianzas público-privadas para el suministro de datos: colaboraciones de datos para la calidad del aire en las ciudades.
- Comprender la demanda de innovación basada en datos en el sector público: el caso de los procesos algorítmicos.
- Alinear las políticas a nivel de la UE y las prácticas locales en el contexto de los espacios de datos europeos.
Tras el análisis de los estudios que recoge este documento comunitario, sus autores redactan un conjunto de conclusiones de su trabajo. Unas conclusiones de las que vamos a destacar los aspectos más importantes.
En primer lugar, se especifica que la generación de espacios de datos va a depender en gran medida del esfuerzo constante y consciente y de la participación activa de países, regiones y municipios.
El documento deja claro que una descripción más acertada del territorio gracias a los datos adecuados ayuda a comprender los desafíos a los que se enfrentan las autoridades, empresas y ciudadanos y a encontrar las mejores soluciones para estos.
Para ello, nos enfrentamos a un conjunto de barreras a romper lo antes posible. Entre ellos, resaltan la excesiva duración total de los procesos regulatorios europeos, así como la incertidumbre respecto a ellos, la falta de capacidad local, la incertidumbre tecnológica y los importantes costes que conllevará generar los espacios de datos.
También se habla de la identificación de varios ángulos estratégicos que pueden actuar como habilitadores clave para la participación activa de las ciudades, regiones y municipios en el establecimiento de los espacios de datos.
Entre estos habilitadores se encuentran las tecnologías y metodologías que mejoran la agilidad de la infraestructura general, la soberanía digital y la gestión eficaz de los datos. Por ejemplo, la optimización del acceso y la gestión de infraestructuras en la nube.
En resumen, podemos decir que trabajar para obtener espacios de datos bien estructurados y mantenidos y que respondan a las demandas de la sociedad es la base para una participación exitosa en colaboraciones de datos. Con ella la sociedad podrá beneficiarse de la creación y transferencia de conocimientos, mejorar la toma de decisiones y el seguimiento y la evaluación de políticas relacionadas.
Para todo ello, es necesaria una exploración continua de las tecnologías emergentes y las demandas cambiantes. Un carácter innovador que forma parte del ADN de Geograma. Si te interesa conocerla más a fondo, te animamos a echar un vistazo a nuestros casos de éxito y a contactar con nosotros para saber las oportunidades que se abren al aplicarlas a tu proyecto.
